FSC-CCOO Castilla y León | 5 mayo 2024.

2024-04-24

Las personas trabajadoras de Alsa inician dos días de huelga

    La instalación de unas cámaras DriveCam y el desconocimiento de la hora de entrada y salida hasta el día anterior por la mitad de la plantilla son algunos de los motivos que llevan a las personas trabajadoras a secundar las jornadas de paro.

    24/04/2024.
    Foto CCOOCyL

    Foto CCOOCyL

    Las personas trabajadoras de la empresa Alsa han iniciado esta mañana dos días de huelga. Uno de los motivos de la convocatoria es la instalación de DriveCam en los autobuses, dos cámaras con inteligencia artificial que monitorean “constantemente” la actividad tanto dentro como fuera del vehículo y son capaces de grabar patrones de conducta, señales de tráfico, cambios de carril… “Esto no solo afecta a los conductores afecta a los clientes, al resto de usuarios de la vía y a los menores de edad que llevamos en los transportes escolares”.

    Además, otra de las razones es el desconocimiento, por parte de la mitad de la plantilla, de la hora de entrada y salida de su jornada laboral hasta el día anterior, mientras que al resto se les modifica el servicio alterando vehículos, horarios y servicios sobre la marcha. “Todo esto es altamente sorprendente en una empresa en la que su modelo de negocio son las concesiones de líneas regulares (repiten itinerario horario y calendario), es decir, son totalmente predecibles a lo largo del tiempo”, denuncian antes de advierten de que “todavía no disponen de cuadrante del mes de mayo “a pesar de las reiteradas peticiones”.

    También se exige la limitación de la jornada máxima a 10 horas y que la empresa organice en dos o tres turnos de trabajo las jornadas laborales. “Por seguridad no se puede tener a un trabajador a 15 horas todos los días”.

    El Comité de Empresa de CCOO y USO de las empresas filiales de Alsa (CALECAR y TAR) muestra su repulsa por los servicios mínimos impuestos por la empresa, ya que impiden el derecho fundamental a la huelga al implicar a una gran parte de las personas trabajadoras a realizar servicios intercalados entre dos empresas del grupo con distinto convenio.

    Asimismo, exigen “auxilio” a la Junta de Castilla y León para que medie y “ponga freno” a las injusticias realizadas por una empresa que vive de concesiones públicas, es decir “de los impuestos de los ciudadanos”.